El color blanco es una de las tendencias que más éxito está teniendo en los últimos años. Sin dejar de ser un color absolutamente tradicional, la gran variedad de tonos que ofrece esta gama permite una enorme versatilidad en lo que a decoración se refiere, dotando a tu hogar de la personalidad que necesita.
Si a los tonos blancos en paredes y muebles de tu hogar le añades diferentes espejos en las paredes, el espacio resultará todavía mayor, algo ideal para las casas pequeñas. Es preferible que las paredes sean lisas y que la pintura blanca elegida sea con brillo, esto dará aún mayor sensación de limpieza.
Los muebles en color blanco permiten la combinación con diversos con accesorios en colores marrones y negros, que aportan un toque exquisito de elegancia.
Combinaciones con negro y marrón
El plástico, el aluminio, el vidrio o el mármol son materiales que van a la perfección con estos tonos. Pero existe una enorme gama de blancos (que pueden ir variando hacia los beige, el blanco humo o los tonos hueso), que aportarán una especial y acogedora sensación si finalmente son combinados con alfombras y muebles en marrón.
Si tu tendencia es más cosmopolita, te recomendamos que te decantes por los extremos, la mezcla casi al cincuenta por ciento de los blancos y los negros. Eso sí, los muebles siempre deben tener toques brillantes para aportar mayor sensación de luminosidad y, sobre todo, de amplitud.
Estos tonos son los característicos de la decoración feng shui, cuyo filosofía esencial es atraer las buenas energías a tu hogar. Así pues, además de contar con un espacio lleno de estilo y decorado con exquisito gusto, podrás beneficiarte de los postulados de estas leyes orientales para disfrutar aún más de tu vida en casa.